Nora Rodríguez, fundadora de Happy Schools Institute (Neurociencias y educación para la Paz), apunta las cuatro señales que hay que dectar para saber si tu hijo lo esta sufriendo
Actualizado:09/05/2021 15:48h
Entrevista a Nora Rodríguez, fundadora de Happy
Schools Intitute y pionera en España en el estudio del bullying. Es
creadora además del programa internacional LAZOS, con estrategias para todas las
etapas evolutivas.
¿Los niños y jóvenes naturalizan el bullying aun en el aprendizaje online? Es por eso de que «ocurrió toda la vida»…
No, los alumnos no quieren el bullying, ellos no saben cómo empieza ni saben cómo pararlo. Hay que enseñarles la importancia de prevenirlo y estrategias fáciles para resolverlo. El problema es que los adultos no tienen herramientas eficientes para prevenir. Por otra parte, los estudios demuestran que hoy en los colegios sólo se paran alrededor del 4% de los casos. Así que es fundamental partir de la base de que en todos los colegios hay bullying. Hoy es necesario partir de ahí, más que esperar a resolver lo que va apareciendo.
Entonces, ¿por dónde empezamos?
Es necesario entender que se trata de un
desequilibrio de poder real o imaginario, en el que un niño o un grupo más
poderoso intimida a uno que es poderoso donde todos los alumnos acaban
psicológica y emocionalmente dañados, a corto y largo plazo. Ahora bien, es
posible darle la vuelta con un programa intensivo, que ponga el foco en la
inteligencia social de todo el grupo, con estrategias que estén en sintonía con
el cerebro. Con el programa LAZOS cambiamos la
cultura escolar potenciando el desarrollo humano. Como un Erasmus infantil para
activar la resiliencia en las aulas desde las aptitudes que nos hacen más
humanos. De hecho LAZOS es el acrónimo de Liderazgo educativo
y estrategias antiullying para docentes, Amabilidad y
competencias basadas en el cerebro social, Zonas amigables con
22 desafíos para potenciar fortalezas e inteligencia social de los
alumnos, Oportunidades de aprendizaje para ser mejores, Solidaridad y
aprendizaje de servicio. Los alumnos en este programa integral son los
encargados de mantener la cultura escolar amigable con profesores mentores.
Usted se refiere también al bullying online, ¿cómo podemos reconocerlo?
Cuando los alumnos se acostumbran a ver que se
trata de algo que es un problema de todos, los profesores llegan a tener que
resolver hasta dos o tres casos por semana, y a veces ni dan abasto.
Padres y docentes pueden empezar a
observar de cerca la posibilidad de que se trate de las primeras fases del
bullying cuando se dan al menos cuatro de las siguientes
señales:
-Se niegan a
participar de las clases online con cámara encendida,
-Se muestran ansiosos antes de entrar a la sala,
están pendientes del teléfono,
-Manifiestan que se ríen de él o ella cada vez que habla
ante todos,
-Están pendientes de lo que puedan opinar de ellos,
-Hay un aumento de comportamientos nerviosos
-Hay quejas físicas frecuentes, como dolores de
cabeza o de estómago, particularmente antes del inicio de las clases,
-Se muestra retraído o pensativo, más que de
costumbre,
-Se autocritica, está pendiente de su imagen.
Si bien algunos adultos consideran los
comportamientos de acoso como una parte inevitable del crecimiento. En algunas
de mis investigaciones de terreno, ya en el 2004, cuestionaba esa suposición.
Se han detectado síntomas de estrés postraumático en alumnos que sólo miraban
situaciones continuadas de violencia en las aulas hasta pasados diez años del
evento.